Por Comunicaciones

Autor Invitado: Mauricio Moresco. Jefe de Proyectos de la Asociación Cultural para el Desarrollo Integral – ACDI

Menos de un año después del Acuerdo de Paris y celebrando su entrada en vigencia antes de lo que se hubiera podido imaginar, los países signatarios de la Convención Marco de Naciones Unidas frente al Cambio Climático (UNFCCC) se han reunido en Marrakesh para su 22º conferencia. La COP22 marcó el inicio de una nueva era en la gobernanza climática global, poniendo foco en la implementación, acción y colaboración. La transición a esta nueva era ha sido señalada en la Proclamación de la Acción de Marrakesh, que refuerza y convoca el compromiso político con el Acuerdo de París.

Actores no-estatales han sido reconocidos reiteradamente durante la COP22 por su rol para que las Contribuciones Nacionales (NDCs) sean efectivamente cumplidas y mejoradas. Empresas, sociedad civil, gobiernos subnacionales, inversionistas, institutos de investigación y todos los demás sectores de la sociedad deben ser agentes de cambio en esta nueva fase. Las metas puestas hoy sobre la mesa por los países no permiten mantenernos bajo los 2°C ni garantizar la resiliencia de los sectores vulnerables, y solo con la colaboración de todos los sectores será posible aumentar la ambición y garantizar la efectiva implementación de las Contribuciones Nacionales. Señalando la urgencia de que todos los sectores accionen y lo hagan en conexión con los NDCs, fue lanzada durante la COP22 la Marrakesh Partnership for Global Climate Action. La Alianza busca catalizar y apoyar la acción climática al 2020 por medio de una hoja de ruta establecida.

El 2018 se ha reafirmado como un hito clave para la implementación del Acuerdo de París. Se espera que hasta este año todos los procedimientos del acuerdo estén definidos y los países revisen sus NDCs. A pesar de la cercanía de la fecha, hasta ahora Argentina es uno de los pocos países que han revisado su Contribución. El proceso implementado por Argentina para hacerlo, por medio de mesas multisectoriales abiertas y plantillas de consulta, de las cuales el Proyecto GRAN CHACO PROADAPT ha participado, han sido reconocidas como una práctica pionera, que debe seguir en la implementación del NDC e inspirar a otros países. El capítulo argentino del Proyecto GRAN CHACO PROADAPT ha participado durante 2016 de la revisión del NDC y seguirá activo en este proceso, tejiendo conexiones entre la acción multisectorial en adaptación en el Chaco y la contribución argentina.

En línea con el rol creciente que actores no-estatales desempeñan en la nueva gobernanza climática, la plataforma ActionLAC impulsada por Fundación AVINA ha organizado durante la COP22 el evento paralelo “ActionLAC: Acelerando la acción climática por medio de la colaboración”. La plataforma presenta y acompaña la implementación de compromisos de acción climática en América Latina, y en su evento paralelo ha abierto espacio para el posicionamiento de iniciativas de la región el Gran Chaco. Entre los panelistas se ha destacado la Ing. Maria Elina Mali Serrano, ministra de Planificación, Ambiente e Innovación Tecnológica del Gobierno del Pueblo del Chaco, Argentina, quién afirmó su compromiso con el clima .

En el mismimg-20161114-wa003o evento, la alianza entre el Proyecto GRAN CHACO PROADAPT y los INIAs DE Argentina, Paraguay y Bolivia promovida por FONTAGRO ha sido destacada por su contribución para la resiliencia y adaptación de pequeños productores rurales en Argentina, Paraguay y Bolivia (foto 2). Estas acciones en el Gran Chaco también han sido presentada en el evento “Multi-level and multi-stakeholder governance for climate action: learning from good practices”, organizado por el European Economic and Social Comittee.

La COP22 ha reforzado la urgencia de la acción climática y la necesidad de colaboración entre múltiples sectores para que el futuro sea efectivamente compatible con el clima. EL 2018 será un momento importante de contabilizar y visibilizar las acciones climáticas, y las iniciativas conjuntas de  GRAN CHACO PROADAPT y FONTAGRO pueden ser un ejemplo concreto desde América Latina para el mundo de colaboración y adaptación en escala.